- El PSOE en el Ayuntamiento aplica el principio de “A Dios rogando y con el mazo dando” ya que mientras pone buena cara para algunas cosas, en otras, impone su criterio sin importarles el enfrentamiento con vecinos u oposición.
- La actitud del Alcalde de La Roda diciendo que los acuerdos de Pleno “son para respetarlos” recuerda más a otros momentos en los que funcionaba el ordeno y mando. Todo acto administrativo es susceptible de ser recurrido o alegado y el Ayuntamiento de La Roda no puede impedir que los vecinos muestren su disconformidad.
- El Templo del Salvador es bien de interés cultural desde 1981 y cualquier modificación externa o interna debe ser solicitado por el titular del mismo y contar con el beneplácito de patrimonio.
“El Alcalde de La Roda sabe que se ha equivocado a la hora de aplicar la denominada ley memoria histórica. Sólo así se entiende que en una rueda de prensa ,de casi media hora, le dedique el 90 por ciento del tiempo a criticar a la oposición olvidando el hecho de que cientos de rodenses, por diferentes vías, han mostrado su disconformidad con el cambio de denominación de las calles”, afirma el Concejal Popular Constantino Berruga.
“Ha quedado claro que se podría haber realizado la aplicación de la legislación vigente sin necesidad de cambiar el nombre de la calle a 1500 rodenses. Juan Ramón Amores y su equipo han priorizado otros aspectos antes que evitar molestias innecesarias a los vecinos de nuestro pueblo”, señala Berruga.
La política que Juan Ramón Amores y su equipo llevan en el Ayuntamiento de La Roda es la de “a Dios rogando y con el mazo dando”, es decir, ponen buena cara a algunas cosas y para otras se aplica contundentemente el criterio del equipo de gobierno, aunque eso suponga enfrentarse a vecinos como ha ocurrido en la Calle Castelar o en el cambio de denominación de ciertas calles.
“Juan Ramón Amores señaló en su rueda de prensa que cuando se denominó el Parque Adolfo Suárez no hubo ningún problema, lógico, esa propuesta fue conjunta de los dos grupos, incluso, contó con su voto favorable ya que por entonces era concejal en el Ayuntamiento de La Roda. Ahora se ha hecho desde la imposición y sin tener en cuenta los problemas que se van a generar a los vecinos”, asegura Constantino Berruga.
Una de las cosas que más nos ha sorprendido es que el Alcalde de La Roda critique a los vecinos que “legítimamente han decidido recurrir el acuerdo de Pleno en el que se aprobaba el cambio de denominación de las calles” Es sorprendente que señale que “los acuerdos de Pleno son para acatarlos” cuando en un estado de derecho todo acto administrativo, sea el que sea, es susceptible de recurso. Intentar coartar a los vecinos diciendo que están “colapsando el ayuntamiento presentando estos recursos” es buscar que no se presenten más recursos y son afirmaciones de otra época y nos parecen muy desafortunadas.
“Si el Ayuntamiento decide retirar la placa de la fachada de la Iglesia debe recordar que el Templo de El Salvador es Bien de Interés Cultural desde el año 1981 y cualquier actuación sobre el mismo debe venir avalado con las autorizaciones pertinentes y, además, le corresponde al titular del inmueble, que evidentemente no es el Ayuntamiento, tramitar todos esos permisos para que la normativa se cumpla exactamente igual que se lo les exigimos a cualquier vecino”, concluye Berruga.